Obesidad
Epidemiología del sobrepeso y la obesidad:
La obesidad es un problema mundial creciente. En la actualidad se considera una alteración epidémica global, por lo que incluso ha sido llamada “globesity”. Los últimos cálculos llevados a cabo por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2005 indican que para esa fecha había 1.600 millones de adultos mayores de 15 años con sobrepeso en el mundo y que al menos 400 millones eran obesos. De acuerdo con esa misma organización, en 2015 habrá 2.300 millones de adultos con sobrepeso y 700 millones con obesidad en el mundo. El aumento en la prevalencia de obesidad se asocia con incremento en el riesgo de otras enfermedades crónicas como diabetes mellitus tipo 2 (DM-2), enfermedad cardiovascular, enfermedad cerebrovascular, hipertensión y algunos tipos de cáncer. En Colombia, el fenómeno tiene un comportamiento ligeramente diferente al reportado a nivel mundial. De acuerdo con los datos de la OMS, el porcentaje de mujeres entre 15 y 49 años con sobrepeso en el año 2000 era 40.8%, pero aumentó a 49.6% hacia el 2005. Para el año 2007, el sobrepeso en la población entre 18 y 69 años llegó al 46%. Según esta misma organización, 13.7% de los habitantes de Colombia, para el año 2007 podían ser catalogados como obesos, de acuerdo con su índice de masa corporal (IMC). Por el contrario, los datos de la Encuesta Nacional de Salud, publicada en 2007, difieren ostensiblemente de los reportados por la Organización Mundial de la Salud. De 10 acuerdo con esta encuesta, la prevalencia de sobrepeso en Colombia era de 32.31% entre adultos de 18 a 69 años, en 2007. Para esa misma fecha y según la encuesta nacional, la obesidad en Colombia tenía una prevalencia de 13.71%, siendo más prevalente en la Orinoquía y Amazonía, sitios en donde llegó a 20.37%. Estos datos no son muy diferentes a los reportados por la Encuesta Nacional de la Situación Nutricional en Colombia, llevada a cabo en 2005, que encontró un 32.3% de sobrepeso y 13.7% de obesidad en nuestro país. Así, existen variaciones de acuerdo con la fuente de la información; sin embargo, podría afirmarse que, en Colombia, 3 a 5 de cada 10 personas adultas tenía sobrepeso y cerca del 15% presentaban obesidad en el año 2007. |
Riesgos asociados con el
sobrepeso y la obesidad:
La obesidad se asocia de una forma muy significativa con mayor morbilidad y mortalidad, incluso se especula que el aumento en la prevalencia de obesidad llevará en el futuro a la reducción en la esperanza de vida. Las complicaciones de la obesidad incrementan en forma lineal, conforme aumenta el índice de masa corporal (IMC). Morbilidad asociada a la obesidad: La obesidad genera múltiples problemas para la salud humana; podría decirse que todos los órganos son afectados por esta alteración, bien sea por el exceso de carga mecánica, por fenómenos obstructivos, compresivos o por efectos bioquímicos y moleculares originados en el exceso de tejido adiposo. Dislipidemia: La obesidad se suele acompañar de triglicéridos altos, colesterol HDL bajo y aumento de partículas de colesterol LDL pequeñas y densas. La obesidad abdominal puede generar este patrón lipídico, en parte por el suministro constante de ácidos grasos libres a la circulación portal. Este perfil lipídico se asocia con gran tendencia a producir placas ateromatosas, ya que las LDL pequeñas y densas son excesivamente aterogénicas debido a su tendencia a oxidarse, su habilidad para penetrar el endotelio de la pared vascular, alterar la producción de óxido nítrico, atenuar la vasodilatación mediada por el endotelio, aumentar la inflamación y estimular la proliferación del músculo liso y la agregación plaquetaria. Síndrome metabólico: La asociación de obesidad visceral y el riesgo cardiovascular que se origina en un conjunto de condiciones metabólicas (HTA, dislipidemia, obesidad y diabetes mellitus tipo 2) mediadas por resistencia a la insulina dan origen al síndrome metabólico. El objetivo de la caracterización de este síndrome es la identificación de los pacientes con un riesgo más elevado de presentar un evento cardiovascular y de desarrollar diabetes, para de esta forma, instaurar estrategias agresivas de prevención. Según la Federación Internacional de Diabetes, para definir síndrome metabólico se debe tener un perímetro abdominal mayor de 90 cm en hombres y 80 cm en mujeres (valores de referencia para población latina), además de dos o más entre HTA, colesterol HDL bajo, triglicéridos altos, hiperglicemia en ayunas o diabetes. La obesidad visceral constituye el elemento primordial del síndrome metabólico. Los pacientes con síndrome metabólico tienen un riesgo 1.5 a 3 veces mayor de eventos coronarios y ACV que el de los que no lo padecen, por lo que es necesario lograr una reducción agresiva de los factores de riesgo en esta población. Diabetes mellitus 2: Cerca del 90% de los individuos que padecen DM-2 son obesos(9). Existe una estrecha asociación entre la obesidad, principalmente la abdominal, y la aparición de la DM-2. Adipocinas como el Factor de Necrosis Tumoral alfa (TNF-α), la interleucina 6 (IL-6), la resistina, así como la disminución de adiponectina, ente otros, generan resistencia a la insulina, lo que lleva a los islotes pancreáticos a incrementar la producción de esta hormona, evitando la hiperglucemia. En sujetos susceptibles, este trabajo excesivo puede llevar a un daño irreversible y progresivo de las células beta que va generando una serie de alteraciones en el metabolismo de la glucosa, presentándose inicialmente hiperglucemia en ayunas, intolerancia a los carbohidratos y, finalmente, DM-2. Mortalidad asociada a la obesidad: La obesidad se asocia en forma directa con mayor mortalidad; existe una correlación lineal entre el IMC y muerte. El riesgo de muerte prematura en pacientes con obesidad mórbida es el doble, comparado con aquellos sin obesidad y el riesgo de muerte cardiovascular está incrementado cinco veces. En los Estados Unidos se estima que la obesidad causa un exceso de 300.000 muertes cada año y potencialmente reduce la esperanza de vida entre 5 y 20 años en los obesos mórbidos; se estima que esta generación será la primera en Estados Unidos en no superar la esperanza de vida de sus padres por culpa de la obesidad. |